Otra descollante actuación de Lionel Messi le sirvió a Argentina para derrotar anoche por 3-0 a Uruguay en Mendoza en cotejo válido por una nueva jornada de las eliminatorias sudamericanas para Brasil 2014. El astro de Barcelona en dos oportunidades y Lionel Agüero anotaron los goles del elenco de Sabella, único líder con un punto de ventaja sobre Colombia y Ecuador.
Argentina fue mayormente protagonistaante un equipo uruguayo que optó por intentar bloquear el circuito de juego albiceleste y salir de contra. Sin espacios, al elenco nacional le costó hilvanar situaciones de riesgo en la primera mitad pero merodeó siempre con peligro el arco defendido por Muslera en buena parte gracias a la completa actuación de Messi, conductor y asistidor. Los de Tabárez se animaron un poco sobre el cuarto final de la etapa aunque no le alcanzó para opciones claras de gol pero sí para desnudar ciertas falencias defensivas argentinas.
En el segundo tiempo todo parecía encaminado al empate siempre y cuando no hubiese en campo un jugador para romper el molde. Y, obviamente, ahí apareció Messi para desplegar todo su repertorio. Porque está claro que en cualquier partido que juegue él no hay que guiarse por lógica, por lo que el encuentro transmita. Primero empujó al gol con esfuerzo una jugada que él mismo había iniciado. Después recibió una pelota que perdió Suárez y armó una maniobra en velocidad que culminó con la asistencia de Di María a Agüero. Y luego, como frutilla del postre, ejecutó al ras un tiro libre engañando a propios y extraños.
Con varios puntos altos (Di María, Agüero, Gago) es en vano decir que Messi es el que marca la diferencia y embellece el rendimiento de un equipo que aún no está aceitado y por ello tiene deficiencias y dudas. Ojalá la Pulga nunca se resfríe.
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